La campaña de Mapfre se centró en potenciar sus productos relacionados con la familia. Para ello desde Komodo se trabajó un concepto estratégico y creativo que diera respuesta a sus necesidades, creando un espacio inspirado en los castillos de los cuentos de príncipes y princesas, con un puente y una fortaleza que resaltara su claim “familia segura, familia fuerte”.
En el interior, una serie de experiencias enfocadas a los más pequeños y sus familias donde les permitían interactuar con la marca de manera creativa y diferencial. Generamos una activación por cada producto; seguro de vida (niños atrezzados de guerreros de la época, tenían que luchar contra dragones gigantes); seguro de coche (carrozas de la época); seguros del hogar (set photo opportunity donde los pequeños se convertían en auténticos reyes sentados en los tronos con sus coronas y capas); seguro de salud (y como en todos los castillos medievales, no podía faltar su mítico río, que en este caso se cubrió de cientos de pelotas rojas y blancas y algunas negras… donde los niños tenían que adentrarse y sacar aquellas “ovejas negras” que representaban virus, caries, etc).
Además de todo ello, junto a la Fundación Mapfre creamos un circuito de seguridad vial con bicicletas donde los más pequeños podían aprender el sentido de la carretera y sus normas.